WILEY-Cash In My Pocket
El 2008 no pasará a la historia como un buen año para la cultura del pop. A la crisis que una industria cuyo modelo ha caducado lleva acarreando desde el cambio de siglo, y que año tras año viene diezmando las ventas de producto físico sin que la ascensión del producto digital cubra la diferencia; se ha unido otra mayor, económica y a escala global que amenaza con devastar una buena parte del negocio musical tradicional.