Un ejemplo arquetípico de los problemas por los que la industria discográfica esta atravesando, el debut en solitario de Big Boi ha pasado por tantos cambios en su lista de temas y fecha de publicación, esperando a que alguna de sus canciones rompiera como éxito en las emisoras de radio –lo que finalmente llegaba con ‘Shutterbugg’-, que incluso cortes lanzados anteriormente como singles no formaban parte del producto editado. Lo que se ha convertido en practica común dentro del mundo R&B, ha llevado a mucha gente a dudar que el contenido final del disco tuviera mucho en común con su concepción original. De todos modos, como era de esperar proviniendo de una mitad de Outkast, ‘Sir Luscious’ resultó una obra tan sólida que no se resintió lo mas mínimo con ninguno de los obstáculos que encontró en su camino; la mejor prueba de la increíble forma en la que aun se encuentra el rapper de Atlanta.